Precauciones con los discos SSD

¿Tienes un SSD en tu ordenador? Si es así, seguro que estás disfrutando de su velocidad y rendimiento, pero también debes saber que este tipo de unidades de almacenamiento tienen una vida útil limitada por el desgaste de la memoria NAND Flash que utilizan. Cada vez que escribes o borras datos en un SSD, se produce un ciclo de escritura que reduce la capacidad de almacenamiento de la unidad y puede provocar fallos o pérdida de información.

Precauciones con los discos SSD

Para evitar que tu SSD muera antes de tiempo, hay algunas cosas que debes tener en cuenta y evitar hacer con frecuencia. En este artículo te vamos a contar algunas de ellas, y también te daremos algunos consejos para cuidar tu SSD y alargar su vida útil.

Borrar e instalar juegos y aplicaciones pesadas con frecuencia

Los juegos y las aplicaciones actuales ocupan cada vez más espacio en el disco duro, y es tentador borrarlos e instalarlos según los vayamos a usar. Sin embargo, esto puede ser perjudicial para tu SSD, ya que implica una gran cantidad de ciclos de escritura que aceleran el desgaste de la memoria NAND Flash. Además, si borras e instalas juegos y aplicaciones en la misma partición donde tienes el sistema operativo, puedes fragmentar el espacio libre y reducir el rendimiento del SSD.

Para evitar esto, lo mejor es tener una partición dedicada solo para los juegos y las aplicaciones que más uses, y dejar otra partición para el sistema operativo y los archivos personales. Así podrás reducir el número de ciclos de escritura y optimizar el espacio libre. También puedes usar un disco duro externo o una nube para guardar los juegos y las aplicaciones que no uses con frecuencia, y copiarlos al SSD cuando los necesites.

No tener suficiente espacio libre en el SSD

Otro factor que puede afectar al rendimiento y la vida útil de tu SSD es no tener suficiente espacio libre en la unidad. Esto puede provocar que el sistema operativo tenga que recurrir al archivo de paginación o al archivo de hibernación para gestionar la memoria RAM, lo que implica más ciclos de escritura en el SSD. Además, si no hay suficiente espacio libre, la controladora del SSD no podrá realizar correctamente el proceso de recolección de basura (garbage collection), que consiste en borrar los bloques de memoria NAND Flash que ya no se usan para liberar espacio.

Para evitar esto, lo ideal es mantener al menos un 10% del espacio total del SSD libre, y si es posible, un 20%. Así podrás asegurar un buen funcionamiento del sistema operativo y del proceso de recolección de basura. También puedes desactivar o reducir el tamaño del archivo de paginación o del archivo de hibernación si tienes suficiente memoria RAM, o moverlos a otro disco duro si tienes más de uno.

No usar el modo AHCI en la BIOS

El modo AHCI (Advanced Host Controller Interface) es una interfaz que permite al sistema operativo comunicarse con el controlador del SSD y aprovechar todas sus características y funciones avanzadas, como el comando TRIM, que ayuda a mantener el rendimiento del SSD al eliminar los datos innecesarios. Si no usas el modo AHCI en la BIOS, estarás limitando las capacidades de tu SSD y perdiendo velocidad y eficiencia.

Para evitar esto, lo mejor es activar el modo AHCI en la BIOS antes de instalar el sistema operativo en el SSD, ya que si lo haces después puede causar problemas de arranque o inestabilidad. Si ya tienes instalado el sistema operativo en el SSD sin usar el modo AHCI, puedes intentar cambiarlo, pero hazlo bajo tu propia responsabilidad y con una copia de seguridad previa.

No actualizar el firmware del SSD

El firmware es el software que controla el funcionamiento del hardware, y en el caso del SSD, es responsable de gestionar la comunicación entre la unidad y el sistema.

Problemas de alimentación y cortes eléctricos

Los SSD utilizan chips de memoria y una controladora, y son muy sensibles a la alimentación eléctrica que reciben por parte de la placa base. Tener problemas en la alimentación eléctrica, incluyendo picos, caídas y subidas de tensión, es un problema muy serio, extrapolable a la placa base, fuente alimentación, etc.

No puedes hacer para evitar un corte eléctrico, ya que es algo que depende de tu proveedor de electricidad, de la casualidad y de posibles fenómenos naturales. En este caso lo ideal es contar con un SAI, un sistema de alimentación ininterrumpida que te permita evitar las consecuencias de una caída de tensión, y también de picos y subidas en la red eléctrica.

Gracias a un SAI no tendrás nada de lo que preocuparte si se va la luz, siempre que el mismo tenga una batería lo bastante potente como para mantener alimentado tu equipo durante al menos unos pocos minutos. Ese tiempo te dará margen suficiente para poder cerrar las aplicaciones y guardar tu trabajo, y para apagar el equipo de forma segura.