Instalar Windows 10 sin claves

Lista de keys genéricas

Las claves genéricas de Windows 10 son una licencias facilitadas por Microsoft para ofrecer la posibilidad de instalar el sistema operativo sin necesidad de comprar una licencia oficial. Esto nos permitirá instalar, activar y utilizar el sistema de forma totalmente gratis.

Las claves o keys genéricas para instalar la última versión de Windows en sus diferentes versiones son:

  • Windows 10 Home: TX9XD-98N7V-6WMQ6-BX7FG-H8Q99
  • Windows 10 Pro: VK7JG-NPHTM-C97JM-9MPGT-3V66T
  • Windows 10 Home Single Language: 7HNRX-D7KGG-3K4RQ-4WPJ4-YTDFH
  • Windows 10 Enterprise: NPPR9-FWDCX-D2C8J-H872K-2YT43

Con estas claves, ya podemos instalar la última versión del sistema operativo de Microsoft en nuestro equipo con total normalidad. En el momento en el que nos soliciten la clave de producto tendremos que indicar la clave genérica correspondiente y finalizar el proceso.

Posteriormente, en el momento que adquiramos nuestra clave de activación al comprar la licencia de Windows 10, lo único que tendremos que hacer es activarla. Para ello, debemos seguir los siguientes pasos:

  • Ir a la página de Configuración del sistema (Win+I)
  • Navegamos hasta la opción Actualización y seguridad > Activación
  • Pulsamos sobre la opción Cambiar la clave de producto
  • Introducimos la clave de producto y pulsamos en siguiente
  • Finalizamos el proceso y el sistema habrá quedado activado correctamente
claves genericas windows 101 1

Cómo comprobar si tengo Windows 10 activado

Para comprobar si nuestro sistema está o no activado, lo único que tenemos que hacer es:

Abrimos la página de Configuración de Windows 10

Navegamos hasta la opción Actualización y seguridad > Activación

Nos fijamos en el estado de activación

  • Windows está activado.
  • Windows está activado con una licencia digital.
  • Windows está activado con una licencia digital vinculada a tu cuenta de Microsoft.
  • Windows no está activado.

Si nos encontramos con que Windows está correctamente activado, quiere decir que hemos introducido correctamente las claves y que su activación ha sido correcta. Si no es así, podemos probar a activarlo con las claves genéricas de Windows 10 indicadas anteriormente. Ahora bien, aún así puede que queramos vincular nuestra cuenta de Microsoft, para ello:

  • Iniciamos sesión como administrador para añadir nuestra cuenta de Microsoft.
  • Desde la página de activación seleccionamos Agregar una cuenta.
  • Introducimos nuestra cuenta y contraseña y pulsamos en Iniciar sesión.
  • En la página de activación ya nos debería aparecer que Windows está activado con una licencia digital vinculada a nuestra cuenta de Microsoft.

Cómo instalar Windows 10 sin claves

Para ello, basta con pulsar sobre la opción que nos permite indicar que no tenemos clave de producto o que queremos introducirla más tarde en el momento que nos solicite introducir la clave de producto en su instalación. Esto nos permitirá completar la instalación sin necesidad de meter ninguna clave y podremos probar la última versión del sistema.

Limitaciones a la hora de usar Windows 10 sin clave

Cuando completamos la instalación del sistema sin haber introducido una clave de producto, lo primero que veremos es que nos aparece un mensaje recordándonos que debemos activar Windows 10 y que nos llevará a la página de configuración para que procedamos con ello. Sin embargo estas son el resto de limitaciones que encontraremos:

  • Acceso a ciertas opciones de la página de configuración.
  • Cambiar el fondo de pantalla
  • Modificar lo colores del sistema
  • Cambiar de tema
  • Elegir otras fuentes
  • Personalizar la pantalla de bloqueo
  • Ajustes de personalización del menú Inicio
  • Acceso a algunas opciones de configuración de la barra de tareas

¿Son legales las claves baratas vendidas por Internet?

La respuesta aquí es sí, pero con matices. Básicamente quienes las venden están recurriendo a un vacío legal que se basa en una sentencia dictaminada por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en Luxemburgo en 2012. Dicha sentencia señala que las licencias adquiridas por un usuario son de su propiedad, tanto si las compra con un medio físico como en digital. Así que hecha la ley, hecha la trampa.

Aquí entran en juego las claves OEM, la licencia de uso de Windows que se crea para que los fabricantes de ordenadores lo preinstalen en todos sus equipos. En teoría, las claves OEM deberían ser usadas solo por la empresa que las ha adquirido, pero muchas veces se compran en masa para después revenderlas o filtrarlas.

Si Microsoft descubre que el propietario de una clave OEM está vendiendo las claves, el acuerdo entre las dos compañías finalizaría y la empresa podría invalidar el uso de esta clave permanentemente, por lo que si has adquirido una de estas claves revendidas podrías perderla para siempre.

Si quieres evitar que esto pase la solución más sencilla (aunque no la más barata) es comprar claves Retail. Estas claves son totalmente legales y a diferencia de las OEM, solo pueden usarse en un dispositivo. Si bien pueden ser traspasadas a otro equipo en el caso de que queramos cambiar, no se puede tener nunca activa en dos o más al mismo tiempo.